lunes, 31 de agosto de 2015
Este año no hay picudos
martes, 28 de julio de 2015
Salvemos las palmeras
Por favor, salvemos las palmeras.
Hoy es 17 de febrero y, la prensa de hoy, en distintos puntos de España, da cuenta de los
estragos que, sin descanso ni pausa, está produciendo el picudo rojo en las
palmeras y, además, señala con razón, que la falta de interés y el
desorden reinante por parte de las
Autoridades responsables de su control, hacen que el picudo se desarrolle ‘a sus
anchas’.
La prensa de Orihuela publica un artículo titulado ‘El picudo invade el
Palmeral’ que me permito copiar el primer párrafo. Lo hago con la sana
intención de que puedan opinar Vds., aunque, en este caso, sea ‘en silencio y
para sus adentros’.
“En un paseo por el Palmeral, el segundo más
importante de Europa y declarado Bien de Interés Cultural, se puede comprobar
como muchas de sus palmeras se marchitan poco a poco y esta situación solo
responde a una razón: que están parasitadas por el picudo rojo.
Este insecto campa a sus anchas por este enclave
natural y no para de reproducirse alimentándose de las palmeras a las que
accede por la balona o cabeza, las raíces aéreas «y hasta por el tronco»,
critica Emeterio Navarro, un vecino de San Antón, experto en este enclave y ex
asesor del Ayuntamiento de Orihuela. Son muchas las plantas que han perdido su
fuerza y cuyas ramas ya se desprenden fácilmente de la planta porque en su
interior se están criando las larvas del picudo rojo «que se van comiendo hasta
que acaba con ésta, porque la palmera es su principal alimento»”.
Es desesperante, cuando menos, el
desmadre que se ha montado en algunos Ayuntamientos con el tema del picudo rojo
que, salvo un milagro, nos va a dejar sin palmeras. Es claro que si desaparecen
las palmeras nadie va a morir. Simplemente, cambiaria nuestro horizonte,
nuestro paisaje y poco más. Lo mismo ocurriría si se quemara el Museo Miguel
Hernández de Orihuela, la catedral de Santiago de Compostela, la catedral de
Murcia o las Pirámides de Egipto, si es que se pueden quemar, pongo por caso.
Eso ocurrió con el incendio que destruyó la Biblioteca de Alejandría. Nadie
murió a pesar de la irreparable pérdida que supuso para la humanidad.
Orihuela nació, como tantos pueblos de nuestra tierra, a la sombra de
milenarias palmeras que, ahora, han sido declaradas Bien de Interés Cultural.
La palmera forma parte, desde hace siglos, de nuestro entorno. Hasta donde
alcanzan mis recuerdos la palmera ha marcado mi horizonte. Su majestuoso perfil siempre estuvo
presente en él.
Forma parte de nuestro patrimonio y tenemos la obligación moral de
mantenerla ente nosotros. Ella solo se dedicó a desarrollar belleza para sorprender y pensando que sería
suficiente para estar siempre en este mundo y no se le ocurrió desarrollar armas
con las que defenderse de picudos. Se veía tan bella que, pensó, nadie, ni
nada, se atrevería a perturbar mi vida ni mi belleza.
En otros lugares tienen, monumentos o vestigios de otras civilizaciones,
catedrales, pirámides etc., y las Autoridades correspondientes tienen
establecido unos protocolos de actuación para cada situación anormal que pueda
presentarse y se hace de la forma más natural y, además, todo el mundo entiende
que tienen que ser así.
Termino con el primer párrafo de otra noticia publicada en el Diario de
Huelva.“Aseguran que la "dejadez" del Ayuntamiento a la hora de aplicar el protocolo contra la plaga puede conllevar sanciones por "incumplimiento de la normativa". La plaga ya ha arrasado otros municipios como Huelva o Ayamonte”.
Si siente simpatía por
las palmeras aquí tienen un tema interesante.
Y así, con este trajín, hasta otro día.El picudo de este año
Hola, hoy es 17 de
octubre. Ya ha llovido, nunca mejor dicho, desde mi último post, 20 de abril de
2014, recuerdan, no?
Lo ocurrido, durante este tiempo, ha sido muy diferente a lo que había
previsto. La previsión era que las
palmeras que se contaminaran con picudos no serían tratadas hasta agosto y, de
hecho, una de ellas se contaminó mientras las restantes se han mantenido
sanas.
La curiosidad que puedo rescatar de este periodo es que la palmera contaminada, por la razón
que sea, dejó de estarlo, ignoro si los picudos murieron, es lo
más probable, o, por el contrario, abandonaron la palmera.
Cuando el 20 de abril escribía mi último post imaginaba, con enorme entusiasmo, que este post, el de hoy, cuando lo publicara, estaría plagado de nuevas ideas y experiencias. Siento que no haya podido así, el picudo, con su comportamiento, no lo ha permitido.
Durante este tiempo he visto sólo a dos picudos. El primero
a mediados de agosto, con vuelo torpón e inseguro, se me acercó tanto que, con un
manotazo le obligué a realizar un aterrizaje de emergencia y allí terminó su
vida. El segundo, a final de septiembre. Este lo encontré muerto a cuatro
metros de la palmera más cercana.
En mis contactos vecinales y con poseedores de palmeras me
han comentado que, en general, este año, ‘el tráfico’ de picudos ha sido muy
baja y esto si es importante si somos nosotros la causa.
Otra curiosidad, y susto, es que en agosto descubro que en
la base de una de las palmeras había una ‘escombrera’ de materia orgánica de la
palmera. Ésta ya habían sido castigada, el año pasado, con el asedio del picudo.
Pueden imaginar. Me transformé en ‘laboratorio humano’ y en décimas de segundo
los ojos y las fosas nasales se agrandaron de forma exagerada, eché la rodilla a
tierra y……descubro que la materia orgánica que había en el suelo había sido
depositada por una legión de hormigas que habían decidido usar, como hogar
seguro, una galería que habían realizado
los picudos el pasado, o años, anteriores.
En los próximos días, como hice el pasado año, sin esperar días fríos, voy a podar las palmeras. Este año de forma memos severa que el
pasado. La poda del pasado año me ha permitido, en éste, desarrollar, plena y uniformemente,
el césped.
Y ahora que me había provisto de una colección de ‘fonendoscopios’
para poder ‘escuchar’ hasta el último ‘hálito’ de vida de los moradores de las
palmeras éstos, los picudos, me dejan ‘en el paro’. Nunca se puede estar
seguro. La cosa, aparentemente más insignificante, te hace cambiar tus planes.
A pesar de todo estoy feliz y me pregunto, no estaremos en la antesala del
final del picudo?
Finalmente comentar que me ha llegado información que asegura
que se ha disparado la venta de pimienta de cayena. Esto me hace feliz. Los
amigos que me leen, que nunca pude imaginar tantos, me creen, usan la cayena y protegen,
de forma segura, sencilla y económica, a sus palmeras.
Y así, con este trajín, hasta otro día.
El picudo la palmera y yo
El picudo la palmera y yo
Hola, hoy es miércoles 5 de noviembre de 2014. Hoy quiero contarles lo acontecido en estos
últimos días con relación a las palmeras,
al picudo, y a mí, que también formo parte en la tarea de mantener las
palmeras sanas y aseadas.
En primer lugar,… ayer preparé un nuevo post que se negó a ser
publicado. No sé qué demonios hice cuando lo estaba publicando, misteriosamente
se borró, debido, seguro, a una mala operación. El que estoy
preparando ahora será en sustitución de aquel y, como ocurre siempre, sólo se parecerá en lo esencial. Si, ya sé que esto, lo que acabo de escribir,
no tienen nada que ver con el picudo, ni las palmeras, tiene que ver conmigo,
que también tengo derecho a mis desahogos, o no?
El día 21 de octubre, con una
temperatura de 31 grados lo elegí como ideal para comenzar a podar las palmeras
en contra de lo recomendado de hacerlo en un frio día de invierno. Con esta
actitud quiero ‘tensar’ la relación del
picudo con mis palmeras. Con el tiempo que llevo tratando el picudo he llegado
a la conclusión, muy razonada, que cuando le pierdes el miedo descubres que es un ‘cobardica’. Representa,
para mí, una activada más de la huerta, es decir, una tarea más, además de
regar, abonar, sembrar, sulfatar, recolectar, cosechar o podar. Soy huertano,
un privilegio!!
Durante este año, las palmeras,
siguiendo su ciclo vital, han crecido mucho. Yo, por la misma razón, siguiendo
el mío, he decrecido, soy menos alto. El resultado es que para poder podar las
palmeras he tenido que utilizar una escalera. La escalera y la utilización de
herramientas como corbillón, motosierra, serrucho, tijeras de poda de gran
tamaño, etc., no son compatibles con la escalera a pesar de encontrarme
‘cómodamente’ instalado sobre ella.
A mediodía, con siete palmeras
podadas, me encontraba destruido y muy dolorido. La mano izquierda inflamada a
causa de un profundo pinchazo, y con múltiples pequeñas heridas. Para
información general…. los pinchazos de
las palmeras son muy dolorosos durante mucho tiempo.
Desde la publicación de mi último
post he meditado sobre los resultados obtenidos y el comportamiento del picudo
durante este pasado verano. Recuerdo, y espero que Vds. también, lo comentado
en uno de mis post sobre la palmera de ‘los cuatro picudos muertos’. Esta es
una palmera que después de mucho tiempo de haber sido tratada con pimienta de
cayena encontré cuatro picudos muertos en el suelo. A principios de verano descubro que en una
palmera, los picudos, han hecho una entrada y en ella he visto picudos que
ahora han desaparecido. En mi último post doy cuenta de que este verano sólo he
visto dos picudos, uno lo maté de un ‘manotazo’ y otro lo encontré muerto. La
pregunta que me hago, todavía sin respuesta, los picudos encontrados muertos
murieron por muerte natural o fue a causa de los tratamientos que se
habían hecho a las palmeras con anterioridad
a pesar del tiempo transcurrido?
Con el paso del tiempo
‘navegando’ en contra de los picudos encuentras soluciones que al principio no
podías ni imaginar Al principio todo lo ves negro, no ves las palmeras, sólo
picudos. Es lo que me ocurrió a mí, me quedo sin palmeras, pensaba.
Ahora vivo tranquilo y sosegado
aunque vea picudos. He llegado a la conclusión de que lo más importante, más
que el tratamiento, que también, es descubrir lo antes posible su presencia. Los picudos para destruir una palmera hacen
ruido, mucho ruido, y durante mucho tiempo, y así será hasta que descubran como
roer palmera con ‘sordina’ para hacerlo en silencio. Hasta que la Naturaleza
los dote de esta facilidad, que supongo muy lejana, es cuestión de estar
atentos.
Empecé apoyando la oreja al troco
de las palmeras, ahora dispongo de un fonendoscopio, a modo de oreja gigante, y
con él es fácil descubrirlos, incluso en la zona donde se encuentran. Si
Inyectas pimienta de cayena en esta zona su muerte es fulminante.
Como los picudos no están
permanentemente ‘royendo’ es fácil que pasen, en una primera pasada, el control
de ‘la oreja gigante’ pero en alguna de las siguientes se descubre. Cuando descubra la existencia de picudos no
se alarme, dispone de mucho, muchísimo, tiempo para combatirlos y de infinidad
de productos para hacerlo, además de la pimienta de cayena.
Y así, con este trajín, hasta otro día.
domingo, 29 de marzo de 2015
Los picudos de este año 2
Quiero aclara que aunque, como ahora, he estado aparentemente ausente de mi blog, nada mas lejano de ello. Lo que ocurre es que sólo escribo y publico cuando tengo información, sólo de mis palmeras, que creo interesante. No obstante sigo el día a día de las informaciones que se publican en la prensa que, por si les interesa, les cuento un par de cosas para que opinen, que también es bueno. Resulta que ‘en algún sitio’ tienen programado el adiestramiento de perros para que detecten las palmeras que, en su interior, tienen picudos. En ‘otro lugar’ creen que un pájaro, no recuerdo el nombre, eliminaría parte de los picudos, sólo a los que, después de terminar con una palmera, se trasladan a otra.
Como
soy muy respetuoso con estas cosas y entiendo que todo el mundo tiene derecho,
como yo, a pensar y aportar soluciones al problema, sólo me sonrío.
Ya les he contado en anteriores post lo fácil que es detectar los picudos que
se encuentran dentro de las palmeras, o que palmeras soportan el castigo del
picudo. Recuerdan lo que les contaba del fonendoscopio, a modo de oído, u oreja, gigante?
Pero siguiendo con lo mío, para mi es desesperante.
Nunca imaginé lo que me está sucediendo. Lo he dicho en varios de mis post, y
lo repito ahora, sin picudos no soy nadie. Esta calma me desespera, los
necesito para mantener activa mi guerra contra ellos. Creía, como he dicho en
algún post, que los picudos eran unos cobardicas y que no aparecían por aquí
por miedo a la pimienta de cayena pero nada mas lejos de la realidad. La
realidad es que todo el ‘parque de picudos activos’ de la zona se encuentran
concentrados en las palmeras de mi vecino. Recordarán que mi último post les
daba información sobre una palmera, de mi vecino, destruida por el picudo
rojo. Hoy he descubierto otra igualmente destruida. Mi vecino tiene seis
palmeras, dos están destruidas y hay una tercera que, por la pinta que tiene,
va a entregar su alma próximamente.Tengo claro que mientras mi vecino tenga palmeras ‘potables’ para el picudo, las mías no van a ser molestadas, porque…., qué pinta un picudo solitario en mis palmeras si la fiesta, el lio, el ruido, se encuentra en otro lugar. Yo lo entiendo así. Que nadie piense que los picudos son solitarios y aburridos. Son trabajadores, sociables, participativos y, de forma natural, mantienen fuertes lazos de amistad con sus convecinos. Se sienten mas seguros y felices viviendo en comunidad. Ellos saben que su vida es muy corta y que es una estupidez vivir de pelotera en pelotera o de pelotera permanente. Creo que, al final, el picudo nos va a enseñar un envidiable modelo de vida digno de copiar. La naturaleza los ha dotado de las capacidades necesarias y les ha encargado una única función que cumplen a raja tabla, reproduciros.
Y así, con este trajín, hasta otro día.
martes, 30 de diciembre de 2014
El picudo, las palmeras y el otoño
En primer plano mis palmeras y a la derecha, al fondo, las de mi vecino. La de la izquierda ha sido destruida por el picudo |
Hola, hoy es 8 de noviembre. Y hoy
voy a contar cosas imaginando que Vd. se encuentra frente a mí.
En
unos días voy a fumigar las palmeras con pimienta de cayena.
No, no es que el picudo haya aparecido, que ya me gustaría. En esta época, con
días cada vez más fríos, el picudo no los considera de interés, ni apropiados,
para buscar nueva residencia, por eso sus vuelos, además de torpones e
inseguros, son escasos y la fumigación, en esta época, no es muy efectiva pensada
para combatirlo.
Con
la fumigación que voy a realizar ahora trato de protegerlas contra insectos,
ácaros, hongos, bacterias, etc., La pimienta de cayena es especialmente
especial para ello. Su eficacia es total.
Quiero
aclarar que donde digo fumigación, en realidad, quiero decir ducha. Mi ‘equipo’
de fumigar está compuesto de un depósito, de poliéster, de 500 litros, un motor
eléctrico, sumergible, de 500 W, una manguera de longitud apropiada para
alcanzar todas las palmeras y como pulverizador utilizo un aspersor de riego
del césped. Este equipo es suficiente para llegar a todas las palmas, incluidas
las que miran al cielo, ‘empapar’ el ojo y todo el tronco y todo en un
‘periquete’. (Modernamente ‘periquete’ ha sido sustituido por ‘plis-plas’.)De todas formas no hay que descuidar la vigilancia para que el picudo no nos sorprenda. Seguiremos con la tarea de ‘escuchar’ a las palmeras mediante el fonendoscopio u ‘oreja gigante’. Nuestro éxito, y el fracaso del picudo, es descubrirlo tempranamente. Dispondremos de mucho tiempo para combatirlo.
Cuando
escribo estos sencillos post siempre lo hago pensando en personas
sencillas, particulares, que tienen la suerte de ser propietarios de unas pocas
palmeras y la desgracia de no saber cómo combatir al picudo que está terminando
con ellas. Por otra parte, nunca pienso en estamentos oficiales,
ellos sólo utilizan productos sintéticos nacidos en un laboratorio. Y no
importa lo que ocurra, incluso, si no se muere el picudo y si las palmeras.
La
prensa diaria, en toda España, da cuenta de los estragos que causa el picudo y
también de las ‘peloteras’ que se organizan en los Ayuntamientos entre los
partidos en el poder, que seguro, no han visto un picudo en su vida y los
partidos de la oposición que tampoco saben si el picudo tiene pico. Si no es
así no lo entiendo. Lo lamentable es que mientras se encuentran enzarzados en
estas estúpidas peloteras el picudo, sin pausa ni descanso, sigue prosperando y
matando palmeras. Una verdadera pena.
Ayer
leí un artículo publicado en la prensa de Mallorca y me afectó tanto que estuve
pensando en ir a colaborar defendiendo las palmeras. Repito, una verdadera
pena.
Ignoro
cómo y con que producto tratan a las palmeras pero lo que no se puede hacer es
lo que imagino. Si tratamos a una palmera y la dejamos a su suerte sin más
control que el de esperar a ver ‘qué ocurre’ confiando en la eficacia del
producto estamos haciendo un favor al picudo. A las palmeras tratadas hay que
seguir ‘escuchándolas’ hasta que queden en ‘silencio’ durante muchos días. Si
una palmera se encuentra en silencio es porque, seguro, nadie, ni nada, la está
destruyendo. Escuchémosla, por favor.
Como
ya he comentado en alguna ocasión si nos quedamos sin palmeras no va a ocurrir
nada, simplemente, nos quedamos sin palmeras.
Y así, con este trajín, hasta otro día.
domingo, 28 de diciembre de 2014
Las palmeras y el picudo
Las palmeras y el
picudo
Hola, hoy es 13 de noviembre. Hoy
quiero tratar sobre el aspecto de desidia, y abandono, que presentan la mayoría de palmeras que son
destruidas por el picudo.
Busquen en la Red, y vean, fotos
y videos de palmeras destruidas por el picudo y podrán comprobar la veracidad
de mí afirmación. En una gran mayoría se trata de palmeras que durante años
nadie se preocupó de ellas. Carecen de aseo. Nadie podó, abonó ni regó. Son
palmeras que han estado abandonadas
durante mucho tiempo.
Pero qué ocurre cuando aparecen
con al ‘ojo’ amarillo? Los comentarios más
habituales son…..hace una semana estaba sana y…. ahora… cómo es posible que en
tan corto periodo de tiempo el picudo
haya podido terminar con este espectacular ejemplar? Como puede ser tan destructor
un bicho tan pequeño? Haciendo referencia al bonito y vistoso escarabajo que,
además, no destruye la palmera. Quien la destruye son sus descendientes.
No se deje influenciar por este
espectáculo y piense que el picudo, por muchos que sean, son tan pequeños y su
periodo vital tan corto que necesitan mucho tiempo y varias generaciones para
terminar con la vida de una palmera. Tenga en cuenta, y esto es posible que sea
la primera vez que le lee, que al final de la metamorfosis aparece el picudo, el escarabajo,
el que vemos, que no come ni destruye la palmera, sólo pone huevos y muere. Se
necesitan muchas generaciones y muchos picudos para conseguirlo.
Voy a tratar de explicar, hasta donde pueda, como es la vida de un picudo hembra. Este personaje, pone huevos y muere, pero cuando muere? Al día siguiente de poner los huevos, a los quince días, al mes o a los dos meses? Su tiempo de vida es variable y depende, exclusivamente, de la temperatura.
Así, tenemos que, para una temperatura de 20º la hembra vive 200 días, a 25º 151 días, a 30º 75 días, a 35º 75 días. Esta información ha sido publicada por la CAR Murcia, mi comunidad, de donde la copio.
Ciclo biológico. Los huevos tardan en eclosionar de 3 a 5 días, las larvas de 40 a 60 días y la pupa 20-25 días. Pueden imaginar la influencia de la temperatura en su ciclo vital y también lo importante de realizar tratamientos de invierno. En invierno hay, tenemos, que inyectar en el tranco, pimienta de cayena u otro producto de reconocida eficacia.
Cuando eclosionan los huevos,
después de 4 o 5 días de su puesta, los
pequeños picudos empiezan a comer
palmera y siguen así un máximo de 65 días, dependiendo de la temperatura, hasta que finalmente construyen su rústico capullo con fibra de la palmera. En el
interior del capullo se producen una serie de transformaciones, metamorfosis, y finalmente parece el bello y alado picudo. Este individuo, si es hembra, es
inmediatamente fecundado. Si calcula, no sé cómo lo hacen, que la palmera tiene
reserva alimenticia para la nueva generación, deposita los huevos en ella. Si
no es así, si no tiene seguridad con la reserva de alimentos, la abandona y busca otra para depositar los huevos. Como verá la
facilidad de volar, también camina, sólo sirve para encontrar una nueva palmera.
La naturaleza no necesitó dotarlo de muchas habilidades para volar. Vuela
torpe, inseguro y rústicamente.
De acuerdo con lo anterior, cada
nueva generación de picudos pasa, poco mas de un mes, casi todo el tiempo,
‘royendo’ la palmera. Desde que eclosionan los huevos hasta que construye el
capullo. Es muy fácil y tenemos mucho tiempo para descubrirlos. Hay que poner
empeño y atención.
El éxito para exterminarlos es
descubrirlos lo antes posible. Fíjese de la importancia de su descubrimiento
temprano. Imagine que a nuestra palmera, todavía sin picudos, cuando entra el
primero deposita 200-300 huevos. Siga imaginando que la mitad de los huevos no
prosperan debido a la temperatura, u otra variable, y aun así tendremos 100
huevos que eclosionarán de los cuales 50 son hembras, sólo es un ejemplo. Después de todo el ciclo biológico tendremos 50
bellas, y bonitas, picudas aladas que depositaran otra nueva puesta de huevos.
Nueva generación que repite el mismo ciclo.
Siga Vd. calculando.
Tenemos que ‘escuchar’ a las
palmeras porque ellas, aunque Vd. no lo crea, saben que su vida depende de
nosotros. Bueno seria, también, que dejáramos de estúpidas discusiones y
trifulcas, especialmente en estamentos públicos, cojamos el tema con seriedad y
actuemos con responsabilidad. Nos estamos jugando las palmeras.
Y así, con este trajín, hasta
otro día.
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